Coche sin arranque: 5 causas fáciles y cómo solucionarlas

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Posibles razones por las que tu coche no arranca y cómo solucionarlo

Llegas con prisa al coche para ir al trabajo, giras la llave o pulsas el botón de encendido, y nada sucede: el coche no arranca. Este problema, aunque común, puede tener varias causas y algunas pueden ser difíciles de identificar, especialmente las relacionadas con el sistema eléctrico y la batería.

1. No se enciende el cuadro de mando al dar contacto

Si al activar el contacto no se enciende ninguna luz ni señal en el cuadro de mandos, probablemente sea un problema eléctrico serio. Aunque la batería esté descargada, suele quedar algo de carga para encender al menos las señales básicas. La ausencia total de luces puede deberse a un fusible fundido, un fallo en la centralita o un problema en el sistema eléctrico. En este caso, es recomendable revisar fusibles inicialmente y, si no se resuelve, acudir a un taller especializado.

2. El cuadro de mandos funciona pero el motor no gira

Cuando al girar la llave el cuadro de mandos se enciende, pero el motor de arranque no se activa —no se mueve ni un poco— es posible que el motor de arranque esté bloqueado o haya dejado de funcionar. En modelos antiguos se solía intentar golpear suavemente el motor de arranque para liberarlo, pero en coches modernos con mucha electrónica, esta solución ya no es recomendable. La opción más segura es llevar el vehículo a revisión profesional.

3. El motor gira pero no arranca

Puede ocurrir que el motor de arranque funcione perfectamente y el motor se mueva, pero no consiga ponerse en marcha. Esto puede deberse a:

Falta de combustible, sea por tanque vacío o problemas en la bomba o filtro de combustible.
Suciedad o fallo en los inyectores que no permiten la mezcla adecuada para la combustión.
Problemas eléctricos que impiden que la chispa llegue a las cámaras de combustión (por ejemplo, bujías defectuosas o fallos en el cableado).

Revisar el nivel de combustible y el sistema de inyección es fundamental, así como no apurar demasiado la reserva para evitar estas situaciones.

4. Problemas para arrancar en días fríos

El frío afecta la batería, que ofrece mayor resistencia y pierde eficiencia para suministrar energía. Para facilitar el arranque en estas condiciones, es útil pisar el embrague al dar contacto, ya que el motor de arranque tendrá que mover menos componentes. En coches diésel, un calentador defectuoso puede impedir el arranque; se recomienda esperar a que el testigo de los calentadores se apague antes de intentar poner en marcha el motor.

5. La batería tiene poca carga: uso de pinzas

Si sospechas que la batería está descargada, utilizar pinzas para arrancar el coche con la ayuda de otro vehículo es una solución práctica y económica. Es crucial conectar bien los bornes: positivo con positivo y negativo con negativo. Tras arrancar, si la batería ya no mantiene carga adecuada, es recomendable reemplazarla o recargarla para evitar que vuelva a fallar.

Una batería en mal estado o con poca carga dificultará mucho el encendido, sobre todo en situaciones de frío o cuando el motor de arranque requiere mucha energía.

Recomendaciones generales

Si el coche no arranca y no consigues identificar la causa rápidamente, lo más prudente es llamar a asistencia profesional para evitar daños mayores o quedarte varado. Mantener en buen estado la batería, revisar regularmente fusibles, el sistema eléctrico y el combustible pueden prevenir estos inconvenientes.