Cómo limpiar y dejar reluciente el tubo de escape de tu coche
Al limpiar el coche, solemos dedicar especial atención a elementos visibles como los cristales y las llantas, pero un aspecto que a menudo se pasa por alto es la limpieza del tubo de escape. Cuando está sucio, puede afectar la estética del vehículo, dando un aspecto descuidado. En cambio, un escape limpio y pulido puede realzar notablemente la apariencia general del coche.
¿Por qué y cuándo se ensucia el tubo de escape?
El tubo de escape está ubicado generalmente en la parte inferior trasera del coche, lo que hace que se ensucie fácilmente, especialmente en condiciones de lluvia, nieve o carreteras sucias. Además, el humo que sale por el escape deja depósitos de hollín, haciendo que la zona final luzca negra y sucia, un problema más común y notorio en coches diésel antiguos.
Cómo limpiar el tubo de escape de acero inoxidable o titanio
Para que el tubo de escape vuelva a lucir como nuevo, sigue estos pasos:
- Asegúrate de que el escape esté frío antes de comenzar la limpieza para evitar quemaduras.
- Rocía un desengrasante o un limpiador específico para llantas sobre la parte exterior e interior del tubo de escape. Deja actuar el producto unos minutos para que disuelva la suciedad más resistente.
- Emplea agua y jabón, preferiblemente con una manguera a presión baja o media, para eliminar los restos de suciedad y el producto aplicado.
- Si quedan manchas difíciles, utiliza un cepillo de cerdas suaves o una esponja para frotar sin dañar la superficie.
- Finalmente, seca cuidadosamente el escape con un paño de microfibra para evitar la formación de óxido y eliminar los últimos restos de suciedad.
Tratamiento especial para escapes cromados
Si la boca del escape es cromada, después de limpiar y secar, se recomienda aplicar un abrillantador de metales para conseguir un acabado espejo que realce el brillo. Puedes utilizar productos muy populares como el “Algodón Mágico” de la marca Stark o el abrillantador “Aladdin” de Sidol, que son asequibles y fáciles de encontrar en supermercados.
Este tipo de abrillantadores suele presentarse en latas metálicas con una esponja impregnada en producto. Es importante usar guantes para proteger la piel y frotar la superficie con firmeza durante varios minutos. Una vez aplicado, deja secar y limpia con un paño de microfibra; notarás que el paño se ensucia al retirar la suciedad, mientras el tubo queda con un brillo similar al pulido profesional.
Limpieza interior del tubo de escape (opcional y avanzada)
La limpieza del interior del tubo, donde se acumula hollín o carbonilla, puede hacerse con una varilla o baqueta especial para eliminar residuos adheridos. Sin embargo, esta tarea requiere cuidado para no dañar el revestimiento interno y puede ser más recomendable realizarla en un taller especializado.
En casos extremos, se utilizan métodos como el agua hirviendo con sosa cáustica para eliminar depósitos, pero este procedimiento tiene riesgos elevados y no es aconsejable sin la debida experiencia y protección.
Consejos finales para el mantenimiento del tubo de escape
- Realiza la limpieza regularmente para evitar acumulación de suciedad y prevenir la corrosión.
- Evita limpiar el escape cuando esté caliente para evitar quemaduras.
- Si tu coche es diésel y el escape está muy sucio, revisa también el estado del motor y considera una descarbonización profesional.
- Un tubo de escape limpio no solo mejora la estética, sino que también puede ayudar a mantener su funcionalidad y prolongar su vida útil.

