Por qué tu coche tiembla al arrancar en invierno
Con la llegada del frío, es habitual que los conductores experimenten una molestia común al iniciar el vehículo: el coche tiembla más de lo normal durante el arranque. Aunque muchas personas atribuyen estas vibraciones simplemente a las bajas temperaturas, en realidad pueden existir diversas causas mecánicas que expliquen este comportamiento.
Causas principales del temblor en el arranque en frío
Las vibraciones al arrancar el motor en invierno suelen tener origen en varios factores técnicos relacionados con el sistema de combustible, la lubricación y componentes mecánicos. A continuación se detallan las causas más frecuentes:
- Motor frío y aceite viscoso: El aceite del motor se vuelve más espeso con las bajas temperaturas, lo que dificulta su circulación rápida para lubricar las piezas. Esto provoca que el motor funcione de manera más áspera hasta que el aceite alcanza la temperatura adecuada.
- Problemas en las bujías o bobinas de encendido: Si las bujías están desgastadas o las bobinas no generan una chispa óptima, el motor puede fallar en algunos cilindros, causando vibraciones especialmente en frío.
- Filtros sucios y admisión obstruida: Filtros de aire o combustible en mal estado reducen la calidad de la mezcla aire-combustible, generando un arranque irregular.
- Inyectores de combustible defectuosos o combustible contaminado: La presencia de impurezas o agua en el combustible, o inyectores obstruidos, afectan la combustión causando tirones y vibraciones.
- Soportes del motor y poleas dañadas: Los silentblocks o tacos del motor absorben las vibraciones; si están deteriorados, se perciben movimientos bruscos al arrancar.
- Polea del cigüeñal defectuosa: En motores diésel es común que una polea amortiguadora dañada provoque vibraciones intensas al iniciar el motor en frío.
- Problemas mecánicos internos: Fallos en la compresión o válvulas también pueden generar temblores, aunque son causas menos habituales.
- Elementos de transmisión o ruedas sueltas: Aunque se relacionan más con la marcha, sueltas o daños aquí pueden causar vibraciones perceptibles al arrancar.
Cómo detectar el origen del temblor
Algunas pruebas sencillas pueden ayudar a identificar la causa de las vibraciones:
- Observar si el temblor disminuye al calentar el motor. Si desaparece, es probable que se deba al aceite espeso o problemas propios del arranque en frío.
- Verificar visualmente el estado de los soportes del motor y si este se mueve excesivamente al acelerar en punto muerto.
- Revisar y, de ser necesario, reemplazar bujías y bobinas para asegurar un encendido correcto.
- Limpiar o cambiar los filtros de aire y de combustible. En diésel, usar aditivos deshumidificantes puede prevenir problemas por agua en el gasóleo.
- Realizar una revisión profesional de los inyectores y de la presión de combustible, además de comprobar la polea del cigüeñal en motores diésel.
Cuándo acudir al taller
Si las vibraciones son muy intensas, persisten después de calentar el motor, o se acompañan de síntomas como pérdida de potencia, humo excesivo, ruidos metálicos o encendido del testigo del motor, es fundamental llevar el vehículo a revisión profesional. Estos signos pueden indicar fallos graves en el sistema de encendido, combustible, soportes o en componentes mecánicos internos.

